Tras dos años como profesor de Mini Básquet en nuestro club; hoy nos toca despedir a Agustín Rosso, quién tomó la difícil decisión de dar un paso al costado, luego de que se le presentase la oportunidad de abrir su propio gimnasio. Un sueño que siempre tuvo y que hoy se hace realidad.
«Tomé la difícil decisión de abandonar la institución, porque se me presentó la oportunidad de abrir mi propio gimnasio, lo cual además de ser un sueño que siempre tuve; es un conjunto de responsabilidades que quiero afrontar de la mejor manera y dedicarle todo mi tiempo. Empecé a trabajar en Macabi Noar en el año 2016. Llegue al club por recomendación de un amigo y comencé dándole clases a los chicos de cuatro años, en lo que sería la escuela de iniciación deportiva. Luego de eso empecé a dar clase a los chicos de cinco y seis años y colaborando con el profe Matías Meirovich, con los demás grupos hasta los trece años. Tuve la oportunidad de trabajar en la colonia de verano del club en lo que fue el 2017-2018. Una experiencia distinta y enriquecedora.
Quiero felicitar y agradecer a los chicos, quienes me han hecho crecer; y por sobre todas las cosas, han crecido ellos tanto a nivel deportivo como personal. Le agradezco a mis compañeros de trabajo, a los padres de mis alumnos y a toda la institución en general. Para ser sincero al principio sentí cierto miedo e incertidumbre al formar parte de un club como Macabi Noar, por el hecho de que yo no pertenecía a la comunidad. Creo que aprendí muchísimas cosas nuevas y me quedan pendientes otras más. Me siento muy feliz, ansioso y con muchas expectativas por lo que se viene. Por un lado triste de tener que irme pero sé que es una gran decisión. Es el inicio de algo nuevo y muy esperado para mi. ¡Gracias Macabi Noar por permitirme conocerlos y crecer con ustedes!»
